Desde el balcón te canto, morena
“Dejo una rosa en tu balcón/dejo en tus manos mi corazón”, cantaban los Acosta años ha pero en vez de una rosa en el barrio viejo prefieren poner música y dejar conciertos en los balcones. Eso ocurrió porque al fotógrafo Janite, ahora también hostelero en “la Mina”, y a su novia Cristina García, de Esmerarte, una empresa viguesa dedicada a crear, producir y comunicar eventos culturales, se les ocurrió hace unos años montar su campamento en una casa del Casco Vello que da a la Travesía da Esperanza. Allí, su balcón casi tocaba en chaflán con el de Ernesto Millo, mecánico naval jubilado pero de los buenos tiempos del naval. Como a todos les gustaba la música, un día que san albariño los iluminó se preguntaron: “Oye ¿porqué no situamos a un grupo de vez en cuando en los balcones para que toquen para el respetable?”
Y así cierto día decidieron poner en marcha los singulares conciertos desde el balcón, en los que la plaza se convierte en pétreo patio de butacas, empeño en el que llevan dos años y han hecho al menos 4 conciertos. Llenan tanto que los de Fai Bistés y O Bañista no dan abasto, sobre todo en birras que a la gente le gusta beber porque son más baratas y porque se oye mejor con ellas jazz, blues… cosas que suenen suavitas y acústicas.
Texto: Fernando Franco
Fotografía: Javier Teniente